Aceite para Parquet o Tarima de Interior: Características y Tipos

También es posible aplicar a nuestros suelos de madera o parquet aceites, y no solo barniz. Descubre las propiedades, ventajas e inconvenientes de este acabado y cómo aplicarlo

Acabados

Una de las preguntas más habituales que se hacen aquellos que van a colocar un parquet o tarima en casa o tienen pensado renovar el acabado es si deben aplicar barniz o aceite.

Si bien el objetivo final de ambos productos es el mismo, proteger y alargar la vida útil de un suelo de madera, la forma de hacerlo presenta importantes diferencias en cuanto a mantenimiento, acabado, resistencia, etc.

En países como España, la opción más conocida y prácticamente omnipresente es el barniz, y en menor medida las ceras. La duda respecto a si utilizar una alternativa como el aceite en tarimas de interior es reciente para la mayoría de consumidores.

De hecho, en múltiples ocasiones descubren este acabado cuando al adquirir un nuevo parquet se lo ofrecen preacabado con aceite.

La meta del presente artículo es dar a conocer y profundizar ligeramente en el uso del aceite como acabado para parquets y tarimas de interior. Comentar las características del producto, sus ventajas y desventajas, y ayudar a comprar el aceite más adecuado en función de las necesidades del lector.

Características del Parquet Aceitado

De forma general, los aceites para madera son un tipo de acabado a poro abierto. Esto significa que el producto penetra en la madera sin cerrar el poro, es decir, no crea una capa superficial como harían otros acabados como el barniz o la pintura.

Por tanto el aceite nutre, deja respirar la madera y mantiene su apariencia natural en mayor medida.

De forma habitual el acabado ofrecido por los aceites es mate, aunque puede pulirse para conseguir un mayor nivel de brillo.

Composición y Tipos de Aceite para Suelos de Interior

¿Vale cualquier aceite para el parquet? Obviamente no. Y cuidado con esto, porque por ahí hemos encontrado algunas recomendaciones de lo más ridículas. Hay quien incluso recomienda aceite de oliva, del que se usa para cocinar, ni siquiera directamente sobre la madera, que ya tiene poco sentido, sino sobre el barniz, lo cual es de traca.

En este punto sería interesante separar las composiciones o productos específicos para tarimas de interior de aquellos aceites para madera que podrían utilizarse en parquets.

Los aceites naturales más utilizados en el mundo de la carpintería y madera son el de linaza y el de tung. Estos son además la base o componentes principales de otros aceites para madera que se comercializan con diferentes denominaciones, como por ejemplo el aceite danés, que además es apto para utilizar en parquets.

Por otro lado, existen aceites específicos para parquets, que en la mayoría de ocasiones tienen como componentes principales aceites naturales, ceras, pigmentos, resinas, secantes o disolventes entre otros.

Esta segunda opción puede resultar más interesante ya que se trata de productos especialmente desarrollados para suelos, en los que se ha prestado atención a cuestiones tan importantes en este ámbito como la velocidad y proceso de secado, profundización o durabilidad.

Desde un pista industrial, es decir, dentro de los tipos de aceites que nos ofertarán cuando vayamos a adquirir un parquet o tarima preacabada, encontramos dos grandes grupos de aceites:

  • Secado por oxidación o secado natural. Este tipo de aceite tiene un gran poder de penetración en la madera, protegiéndola desde dentro. Tiempos de secado relativamente altos, aunque extremadamente fáciles de aplicar. Se trata de un tipo de aceite económico dentro de esta gama de productos. Normalmente ofrecen una resistencia superficial limitada.
  • Secado o curado mediante radiación ultravioleta. Este tipo seca más rápido y cristaliza en la superficie, creando una película, que sin llegar a ser la ofrecida por un barniz, ofrece mayor resistencia e impermeabilidad que la ofrecida por los aceites naturales más tradicionales. Desde un punto de vista práctico, el resultado es similar al conseguido con el aceite con ceras duras o hardwax oil.

Un tipo de aceite para parquet que se ha popularizado mucho últimamente son los hardwax oil o aceite con cera dura, que combinan aceites y ceras. Estás ultimas al endurecerse taponan el poro de la madera y dificultan que incluso los líquidos la manchen. Aunque este tipo de acabado utiliza ceras, no deben confundirse con el encerado tradicional. Se trata de una solución aplicada por fabricantes y también por particulares (de ahí que se esté popularizando tanto).

Otra cuestión importante respecto a los tipos de aceite para parquets es el color. Se pueden comprar aceites transparentes o con tintes. Estos últimos lógicamente alterarán el color de la madera.

También, es posible adquirir tintes y realizar la mezcla a nuestro gusto. Aunque obviamente antes habría que consultar las especificaciones del fabricante al respecto.

aceite para tarima de interior

Ventajas del Aceite para Parquet

  • Apariencia natural con resaltado del veteado y aspecto sedoso.
  • Alternativa al barniz para el parquet sin lijar.
  • Renovaciones rápidas y sencillas. Volver a aplicar aceite no tiene por qué requerir lijados o decapados, como requiere normalmente volver a aplicar barniz.
  • El mantenimiento y renovaciones pueden ser locales. Es decir, no es necesario renovar el aceite en toda la superficie, como sucede con el barniz, sino que se puede realizar en partes según sea necesario. Esta característica es especialmente interesante cuando el desgate se concentra en determinadas zonas como puede ser un pasillo, la entrada, etc.
  • Producto más natural que el barniz. ¡Ojo!, aunque en la mayoría de ocasiones esta afirmación es cierta, no siempre tiene porque ser así. Habría que evaluar los componentes, ya que los disolventes y secantes son habituales.
  • Evita que la madera se seque en exceso y se agriete.

Inconvenientes del Aceite para Tarima Interior

  • Renovaciones de acabados más frecuentes. Aunque como ya hemos comentado son más sencillas, rápidas y se puede realizar de forma local. La periodicidad de este mantenimiento depende en gran medida del uso o tránsito, en algunos casos puede ser cada 6 meses y en otros no hará falta en 2 años.
  • No añaden una capa superficial protectora como el barniz, de ahí que la madera pueda arañarse y mancharse más fácilmente. Si el riesgo de aparición de manchas es elevado, porque por ejemplo el parquet esté en la zona de la cocina, es especialmente recomendable aumentar la frecuencia de las renovaciones, ya que si la madera está bien nutrida (el poro está saturado o lleno) el líquido no penetra y la madera no se mancha o lo hace mucho menos.

¿Barniz o Aceite?

Lo primero que tenemos que tener claro, es que normalmente estos productos son incompatibles. Es decir, no puede aplicar uno, y luego otro para conseguir los beneficios de ambos. Esta aclaración puede ser obvia para muchos, pero las consultas al respecto son habituales, por lo que creemos que no está de más comentarlo.

Respecto a los criterios para elegir uno u otro acabado, a nuestro modo de ver, son los siguientes:

  • Si te interesa un acabado que ofrezca una apariencia natural o con el que resaltar el veteado de la madera, aunque estés sacrificando algo de resistencia superficial, te interesa el aceite.
  • Si lo que buscas es que la limpieza sea lo más fácil posible, y olvidarnos del mantenimiento durante años, te interesa el barniz.
  • Respecto a lo que es el mantenimiento hay dos vertientes: de nuevo, si quieres olvidarte durante años, te interesa el barniz, aunque debes ser consciente de que llegado el momento del acuchillado el proceso será más caro y llevará días, en los que incluso es posible que tengas que irte de casa. Con el aceite, el mantenimiento es mucho más habitual, pero también implica muchas menos molestias, y se aplica relativamente rápido.

Aplicación de Aceite en Suelos de Madera

Lo primero que debes tener claro es que los aceites para madera se aplican sobre la madera, es decir, esta debe estar libre de otros acabados, especialmente de aquellos que crean capa como barnices y pinturas. De hecho, lo ideal es hacerlo sobre madera virgen, aunque un buen decapado y/o lijado puede ser suficiente.

Antes de aplicar aceite:

  • Limpie bien el suelo, no deben haber restos de grasa o suciedad.
  • Asegúrese de que exista ventilación, algunos aceites puede contener sustancias volátiles potencialmente dañinas que necesitan evaporarse.
  • Revuelva bien la lata para asegurarse de que la mezcla es homogénea.

En caso de primera aplicación sobre madera sin acabado previo o decapada:

En función del tipo de aceite y de las recomendaciones del fabricante la primera aplicación puede requerir entre 1 y 3 capas (respetando los tiempos de secado entre ellas).

Sobre tarimas ya aceitadas:

Si la tarima ya se ha aceitado con anterioridad, una capa suele ser suficiente a menos que se haya dejado pasar demasiado tiempo o porque haya habido que decapar por el motivo que fuera.

Si en alguna zona existen rayones o manchas que intuimos puedan ser más problemáticos, podemos realizar un ligero lijado, y aplicar en la zona dos capas en lugar de una.

Nuestra recomendación es que no mezcle diferentes tipos de aceite, y si decide cambiar, hágalo después de decapar o acuchillar el parquet.

Proceso de aplicación:

La aplicación de aceite en un parquet es una tarea sencilla que no necesita de herramienta sofisticada. Se puede aplicar a brocha, rodillo o incluso con un trapo, aunque tratándose de un suelo esta tercera opción es bastante incómoda.

Extienda el aceite en el sentido de la veta de la madera evitando que se acumule en exceso. Si se acumula y no hay posibilidad de extenderlo hacia otra zona puede retirar el exceso con un trapo que no suelte pelusa. Trabaje por zonas para facilitar el trabajo y evitar errores.

El rendimiento del aceite y el tiempo de secado dependen tanto del tipo de aceite como de la madera sobre la que se aplica. Como referencia o valor medio aproximado 20-25 m2/l y entre 30 minutos y una hora para secado al tacto.

Mantenimiento o Cuidado Diario de los Parquets Aceitados

La limpieza general es también sencilla, pero tenga en cuenta que debe evitar el uso de productos abrasivos.

Aspire y/o barra con frecuencia para evitar que la suciedad se acumule. Si se mancha utilice un paño o bayeta muy bien escurrida en agua con algo de jabón neutro, o si lo prefiere utilice un limpiador específico para este tipo de suelos.