La Durabilidad de las Casas de Madera
Alguna vez te has preguntado cuánto dura una casa de madera y cuáles son los factores de los que depende esta durabilidad.
Aunque existen muchos países donde las casas de madera son habituales, en otros como España no abundan. Aquí existen fuertes prejuicios respecto a la vida útil de una casa de madera o su durabilidad. Se debe en gran medida al tradicional uso del ladrillo, hormigón y acero, poniéndose en duda todo lo que no está construido con estos materiales.
Lo primero que debemos saber es que la construcción con madera ha evolucionado y mejorado mucho durante los últimos años. Aun así debemos tener en cuenta que hoy en día existen muchísimas casas de madera con siglos de antigüedad y en perfecto estado. Destaca el templo japonés “Hōryū Gakumonji” finalizado en el año 607 y que es la estructura de madera más antigua que se conserva.
Una de las razones por las que la construcción de casas de madera está viviendo un nuevo auge está relacionado con la bioarquitectura y la preocupación por el medio ambiente. Entre estas ventajas encontramos que pueden ser más baratas de construir, especialmente las modulares y/o prefabricadas. La bioarquitectura permite obtener casas de consumo cero, es decir, donde los gastos en calefacción, aire acondicionado e incluso electricidad se reducen hasta casi desaparecer. Estas y otras ventajas las puedes encontrar aquí.
La durabilidad de la madera
Cuando se hace referencia a la durabilidad de una madera se está hablando de una manera técnica de la capacidad de la construcción mantenerse en uso dentro de unos parámetros previstos de mantenimiento. Es decir, que con el mantenimiento adecuado la edificación dure lo que se ha estipulado (10, 50 o 100 años) sin grandes imprevistos y continuas reformas.
En el caso de la durabilidad de la madera juega un importantísimo papel su resistencia frente a la acción de hongos de pudrición e insectos (xilófagos). Son estos los que producen el deterioro de la madera y su putrefacción.
La aparición de hongos sólo es posible cuando ésta sobrepasa un contenido de humedad del 20 %, por lo que, además de elegir el tratamiento adecuado, también se deberá cuidar el detalle constructivo de manera que la exposición a la humedad sea mínima. Por ejemplo, se recomienda que en la medida de posible los pilares de madera en porches y exteriores no deberán estar en contacto directo con el suelo. Las cabezas de las vigas en muros con posibilidad de humedad por capilaridad deberán estar aireadas, etc.
Durante siglos se han utilizado métodos para frenar la acción de estos agentes, algunos de estos con mucho éxito. Pero ha sido durante el último siglo cuando el avance de la química ha permitido entender mejor el proceso y conseguir soluciones realmente efectivas para incrementar la vida útil de las casas de madera.
Otra gran ventaja que incrementa la vida útil de las casas de madera es la facilidad de realizar reparaciones. En estas mucho más fácil sustituir o reparar una parte que se haya deteriorado por cualquier motivo que hacerlo en una de hormigón.
¿Qué factores determinan la durabilidad de la madera?
Para que la estructura de madera tenga larga vida útil es necesario prestar atención a unas importantes cuestiones:
- Control de la humedad y la ventilación.
- Control de microorganismos e insectos.
- Utilizar la madera adecuada.
- El correcto montaje o instalación. Es habitual que algunos "profesionales" frente a una mala instalación echen la culpa al material en lugar de asumirla ellos por su mal trabajo. El problema original es que hay muy pocos auténticos profesionales dentro del sector de la construcción con madera, y mucho desconocimiento.
La Realidad de las renovaciones y demoliciones
Un tema que pasa desapercibido muchas veces al hablar sobre la durabilidad de las construcciones es el tiempo que realmente están en pie. Que una casa pueda durar 200 años, o incluso 100 no quiere decir que realmente lo vaya a estar. Esta realidad también puede ayudarnos a centrar un poco el debate.
En 2004 el gobierno americano publicó un interesante dato sobre las demoliciones de casas:
- El 66% de las casas de madera demolidas tenían más 50 años.
- El 66% de las casas de hormigón demolidas tenías menos de 50 años.
- El 66% de las casas de acero demolidas tenían menos de 50 años.
Cómo afecta el fuego a una casa de madera
Decir que el fuego no afecta a una casa de madera es mentir descaradamente. Lo que resulta curioso es ver como son muchas las personas que ignoran que el fuego también destruye casas y edificios que están fabricadas con otros materiales.
La resistencia al fuego de un elemento estructural es el tiempo que es capaz de seguir cumpliendo su función resistente en caso de incendio. Para ello la norma NBE CPI-96 exige Estabilidades a Fuego (EF) según una escala de tiempos que va desde los 30 a los 240 minutos.
La madera se clasifica como material combustible y medianamente inflamable (M3 según la norma UNE 23.727). Con la presencia de una llama necesita una temperatura de unos 300º C durante cierto tiempo para que se produzca la ignición. Una vez desarrollado el incendio se produce una combustión rápida de la superficie de la madera y se origina una capa carbonizada que hace de aislante de la propia madera.
En contra de las creencias populares, la evidencia dice que la madera utilizada en la construcción actualmente no presenta un mal comportamiento frente al fuego. Las casas hechas con madera se queman de una forma predecible, lo que dista mucho de ser una desventaja.
Se puede calcular con bastante exactitud el colapso de la edificación, y tomar medidas para durante el proceso de fabricación para mejorar este comportamiento. Además, se puede utilizar productos para ralentizar la acción del fuego como barnices o pinturas intumescentes.
Debemos saber que las grandes vigas de madera que están sometidas a la acción del fuego, aunque parezcan carbonizadas, siguen manteniendo gran parte de sus propiedades físico mecánicas, al contrario de lo que sucede con otros materiales.
Formas de incrementar la durabilidad de las casas de madera
- Elegir la madera adecuadamente y su calidad. No todas las especies, ni todos partes de un mismo tronco son ideales para construir.
- Mantener la estructura seca. No es que no se pueda mojar, lo que debemos es evitar que esté continuamente húmeda y facilitar la correcta ventilación.
- Elegir la adecuada protección frente a la humedad, agua, rayos solares, insectos y hongos. En contra de lo que suele creerse no consiste en renovaciones cada año. En ocasiones algunos de estos tratamientos se aplican únicamente en el momento de construcción.
- Mantenimiento y Renovación periódica de acabados. Es común en todas las casas, las de cemento también se pintan y se aplican impermeabilizantes.