Métodos para Quitar Pintura de Herrajes

Con el paso de los años y la aplicación de toda clase de pinturas en puertas, ventanas, muebles, etc, nuestros herrajes se han ido pintando. En muchas ocasiones nuestros pomos, tiradores, bisagras o manivelas se han manchado aunque hayamos tomado precauciones e incluso en alguna ocasión lo habremos hecho adrede.

Independientemente del motivo ha llegado la hora de quitar la pintura de herrajes y otros elementos metálicos. Existen varias formas, unas más trabajosas que otras.

Hervir el metal

Este método es sin lugar a dudas el más sencillo, el que menos trabajo da y puede que también el que ofrezca un mejor resultado.

• Lo primero es utilizar una olla que ya no quieres volver a utilizar para preparar comida.
• Introduce los herrajes de metal en la olla, y llénala hasta que se cubran en su totalidad.
• Añade unas cucharas de bicarbonato o en su defecto algunas gotas de lavavajillas.
• Deje que hierva durante algunas horas a fuego lento. El número de horas dependerá de la cantidad de pintura acumulada. Cuando la pintura empieza a burbujear y desprenderse del herraje es el momento. Saque las piezas aún calientes con unas pinzas.
• Raspe con un cepillo de cerdas duras para eliminar la pintura que aún pueda quedar en el herraje. No deje que pase el tiempo y se enfrié, si esto sucede el proceso se volverá más complejo.
• Si no se ha eliminado toda la pintura del herraje, el posible que necesite volver a cocerlo.

Lijado o raspado para eliminar la pintura

Este es un método efectivo, con el que podemos eliminar cualquier pintura o barniz de cualquier herraje. Puede utilizar lija, o lana de acero. Incluso puede utilizar lija de grano grueso para quitar más rápidamente lo mayor, y luego pasar una de grano fino para evitar que posteriormente se vean rallones.

Los inconvenientes son varios. Por un lado, es un trabajo tedioso que puede llevar bastante tiempo. Y por otro es posible que existan recovecos o zonas a las que es muy difícil o imposible acceder con una lija.